Los seres humanos envejecemos o nos enfermamos por diversas causas. Entre ellas el sol, el tabaco, el estrés, la mala alimentación, las situaciones hormonales y/o genéticas que van produciendo un excesivo desgaste celular. Es decir, “nos intoxicamos” modificando la química en nuestro cuerpo, lo que provoca el deterioro celular (enfermedad o envejecimiento de las células).

La medicina ortomolecular actúa para estimular la potencialidad personal de cada individuo para vivir una vida al máximo de calidad.

El proceso de tratamiento con la Medicina Ortomolecular lo dividimos en 4 Pasos:

1. Desintoxicación: con el propósito de eliminar los residuos tóxicos que eventualmente puedan haber, así como para lograr una mayor asimilación de los nutrientes.
2. Nutrición: nutrir con las moléculas óptimas las carencias que puedan existir.
3. Restauración: nutrir en base a Oligoelementos, Aminoácidos y Vitaminas el órgano, aparato o sistema que pueda estar dañado.
4. Mantenimiento: corregir y orientar una forma sana y correcta de nutrición adecuada a cada individualidad.

Los Medicamentos ortomoleculares son reconstituyentes, verdaderos y poderosos nutrientes celulares en base a péptidos, enzimas y oligoelementos capaces de recuperar las funciones y regenerar el organismo por completo.

La ciencia de la nutrición ortomolecular, nos enseña a restablecer la salud del enfermo ajustando la dieta y los nutrientes a la “individualidad bioquímica” de cada sujeto. Lo más importante es prevenir, aumentar las defensas naturales innatas en cada organismo, y restablecer el desequilibrio del organismo enfermo a fin de alcanzar una salud completa.

La Medicina Ortomolecular parte del principio de que, en realidad, no existe la enfermedad, lo que sí existe es desnutrición celular, por lo tanto consiste en restituir a cada persona la concentración óptima de sustancias naturales que están presentes en nuestro organismo, con el propósito de corregir alteraciones por carencias o excesos de nutrientes para alcanzar o mantener una buena salud.

Los complejos ortomoleculares “bien empleados” no producen ningún efecto negativo, ni dependencia terapéutica alguna, sino que restablecen las alteraciones del enfermo a través de un reequilibrio químico.

• La Medicina Ortomolecular se propone conservar o restaurar el equilibrio químico necesario para que las células obtengan los nutrientes que les permitan activar los procesos naturales de reparación molecular.
• Su acción terapéutica se basa en proporcionar a todas las células de los tejidos y órganos del cuerpo un medio molecular óptimo compuesto de sustancias nutritivas naturales y libres de toxinas.
• Distintas enfermedades en la actualidad como obesidad, diabetes, cardiopatías, artritis, insuficiencia renal y diferentes tipos de cáncer, entre otras, tienen su origen en un entorno molecular químicamente alterado.
• La medicina ortomolecular tiene muchos beneficios, entre ellos: la depuración profunda del cuerpo, el aumento de la vitalidad en general, la flexibilidad y limpieza de arterias, aumento del sistema inmunológico (defensas), estimulación cerebral (atención, concentración y memoria), contribuye a la prevención de enfermedades y es coadyuvante en tratamientos de enfermedades ya establecidas.
• L’Organització Mundial de la Salut no només la reconeix com un sistema mèdic apte, vàlid i lògic per prevenir sinó per curar malalties, per augmentar benestar i qualitat de vida en persones sanes o pacients amb: diabetis, sobrepès, trastorns cardiovasculars, malalties autoimmunes, neurològiques, psicosomàtiques, osteoarticulars, renals, trastorns estètics, etc.
• Este tipo de medicina no tiene contraindicación alguna, ya que no contienen elementos sintéticos, hormonas, ni produce efectos colaterales en las dosis conocidas y utilizadas. Puede realizarse en adultos y niños. Es, sin duda, un sistema médico seguro y confiable.

1. La nutrición ortomolecular es una terapia holística, esto significa que ve al cuerpo como un todo y a todos sus procesos como interdependientes. Es decir, no prescribe un nutriente en particular para un determinado problema, sino que dirige toda su atención hacia el funcionamiento del cuerpo y de todos sus sistemas en general.
2. Para que la terapia sea realmente efectiva tiene que asegurarse que, en primer lugar, los nutrientes sean absorbidos a través de la pared intestinal y, en segundo lugar, de que puedan alcanzar el interior de las células y los órganos donde más se necesitan.
3. El organismo empezará a funcionar correctamente con un nivel adecuado de los nutrientes que necesita para formar hormonas, enzimas, prostaglandinas, anticuerpos y otras numerosas sustancias. Un organismo que dispone de todos los elementos necesarios para llevar a cabo sus funciones correctamente será capaz de desintoxicarse, regenerarse y establecer un óptimo estado de salud tanto física como mental.