La oncología integrativa o medicina integrativa frente al cáncer es una disciplina médica que trata el paciente en su totalidad y que, respetando los tratamientos convencionales, pautará un tratamiento complementario que ayudará al paciente a superar la enfermedad. 

De todos es sabido que recibir un diagnóstico de cáncer supone un golpe enorme. El paciente se ve en una encrucijada vital y tiene que sacar fuerzas de flaqueza para afrontar la enfermedad y lo mismo les ocurre a sus seres queridos. 

Tras la alarma inicial, encauzan todas sus energías para conseguir el mejor tratamiento, así resulta lógico recurrir a todo lo que pueda ofrecerle alguna ayuda. 

Sin embargo, se topa con mundos separados: el de la medicina convencional y el de las terapias naturales. La mayoría no comenta con su oncólogo que sigue otros tratamientos, porque cree que no le van a comprender y se los van a desaconsejar. 

Esta incomunicación puede estresarle cuando menos lo necesita o llevarle a seguir tratamientos contraindicados o ineficaces. 

Ante el cáncer es mucho lo que las terapias naturales pueden hacer para mejorar el pronóstico y aliviar los efectos secundarios de los tratamientos convencionales. 

La oncología integrativa pretende superar estos problemas ofreciendo la posibilidad de combinar todo tipo de terapias que mejoran la calidad de los tratamientos.  

Sus objetivos son ofrecer información sobre terapias y otras medicinas que mejoran la calidad de vida de los pacientes oncológicos y orientarlos para que no se lancen a probar todas las terapias, sino que elijan en función del beneficio terapéutico que buscan. 

Parte de los efectos positivos pueden explicarse por una reducción del estrés, lo que provoca una respuesta inmunitaria más eficaz.  

Además, es esencial desde el mismo momento del diagnóstico, seguir una dieta anticáncer y recurrir a la homeopatía y medicina ortomolecular para tratar los efectos secundarios de los tratamientos convencionales. 

A menudo se argumenta, desde las posiciones más ortodoxas de la medicina, que las terapias naturales no han demostrado su eficacia, lo que frena el avance del tratamiento integral. 

En realidad, es un obstáculo superado en la práctica, como muestra la incorporación de los tratamientos complementarios en la sanidad holandesa y alemana o la existencia de una agencia para la oncología complementaria y alternativa dentro de la administración pública de los Estados Unidos (OCCAM). 

Sería difícil de imaginar que se hubieran puesto en marcha estas iniciativas sin evidencias objetivas. En España algunos centros públicos están avanzando discretamente hacia la oncología integrativa. 

Una cosa que se echa de menos son puentes entre su medicina convencional y la complementaria; sería beneficioso que los distintos profesionales redactaran informes de los tratamientos que recibe el paciente para una buena y eficaz coordinación. 

Por otra parte, seamos consciente de que, ni los tratamientos convencionales ni los complementarios funcionan siempre. No se pueden presentar al paciente falsas expectativas, pero todo lo que sirva para mejorar el estilo de vida, la alimentación y la reflexión va a resultar positivo. 

Lo interesante del enfoque integrativo es que se caracteriza por el tratamiento global de la salud física y mental del paciente, teniendo en cuenta las emociones, el entorno y sobre todo las relaciones íntimas entre todos los sistemas corporales. 

Los tratamientos complementariotienen un papel fundamental a la hora de tratar al paciente como un todo con aspectos físicos, psíquicos, sociales y familiaresmejorando la calidad de vida y contribuyendo a la salud global del paciente. 

La oncología integrativa permite potenciar la eficacia de los tratamientos convencionales como la quimioterapia, y minimizar sus efectos secundarios con la intervención en tres pilares fundamentales: 

  • Tratamiento nutricional, inmunogenético e inmunoactivador. 
  • Desintoxicación oxigenación celular. 
  • Tener presente siempre la perspectiva psicoemocional, tan importante para lograr una buena calidad de vida. 

En resumenla oncología integrativa aporta un enfoque más holístico y, a largo plazo de la enfermedad, presta más atención a la salud en general de los pacientes que sufren cáncer.  

Así, las estrategias de la oncología integrativa como la nutrición, el ejercicio, el control del estrés y los suplementos específicos, pueden reducir la inflamación y aumentar la inmunidad, lo que puede reducir el riesgo de recaída. 

En nuestro Centro de Medicina Integral Dr Jordi Forés intentamos contribuir a mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes oncológicos ayudándoles a superar esta etapa de su vida tan delicada.